No cambiarte la ropa con la que ejercitas tan pronto terminas tu entrenamiento es un error común. El sudor acumulado en la ropa se seca y es proclive a dejar que bacterias se reproduzcan y se acumulen. Después de una rutina de ejercicios toma un baño y pon a lavar tu ‘outfit’ deportivo.
No solo por cuestión de higiene, sino por mantener la autoestima, es importante atender tu limpieza diariamente y más si haces ejercicios. Sentirte fresco al salir de casa o el gimnasio, es el toque final para un día más provechoso.
Agradecemos a Jiancarlos Bustillos
Fuente: http://bit.ly/1gLAuWp






0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario ;)