A horas de finalizar el año, entramos en un sentimiento de nostalgia que nos hace recordar todo lo que vivimos en los pasados meses. Sin embargo, el hecho de poner en perspectiva las experiencias del 2014 no quiere decir que debamos llenarnos de tristeza o negatividad, ya que según cómo veamos las cosas, las cosas serán. Lo ideal es abrirle paso al venidero año con la mejor energía posible y conscientes de las debilidades y virtudes que deben seguirse trabajando para mejorar, descubrir, crear, aprender y avanzar constantemente.
Estos son algunos consejos que puedes tomar en cuenta:
- Aunque nada está totalmente establecido, es importante compartir con tus familiares o personas queridas este momento. La sinergia que se crea en colectivo, hace que el ambiente se torne mucho más alegre, que es como debemos recibir cada año.
- Los famosos deseos, más que escritos, deben internalizarse y llevarse a la práctica. Aprovecha esta transición de año para construir en tu pensamiento, posibles planes que te permitan alcanzar las metas.
- Si estás de viaje de pareja o incluso solo/a, aprovecha para observar la energía de la gente en la calle. Muchas veces esto funciona para recargar tu propia energía y reflexionar en positivo.
- Es el momento perfecto para cerrar ciclos. Sin llenarte de sentimientos y acciones negativas, depúrate internamente y renueva tus perspectivas, con la seguridad de que cada año es un nuevo comienzo y esto también aplica para tu entorno social.
- No dejes de agradecer por todo lo que este año te ha enseñado. Incluso de las situaciones complicadas se pueden rescatar aspectos que te ayuden a crecer, siendo esto lo que hace la diferencia entre cada año.
Agradecemos a Jiancarlos Bustillos
Fuente: http://bit.ly/1gLAuWp
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